La adicción al pollo a la brasa
- Villa Lover
- 16 jul 2020
- 2 Min. de lectura
¿Sabes por qué somos adictos al pollo a la brasa? La verdad es que este plato es bandera en nuestro país, y tiene una razón de ser.

En verdad, todos nuestros Villa Lovers siempre regresan a Villa Chicken por una razón, porque aman el pollito que les damos. Acá te explicamos porque sentimos cierta debilidad por nuestro pollito a la brasa.
1. Une familias y celebra grandes momentos
Te reunes con tus amigos o familia durante mucho tiempo, es domingo, ¿qué es lo que hay en la mesa? un pollito a la brasa, y esto mantiene a la familia y seres queridos más unidos que nunca. O también, si de emociones hablamos, nada como celebrar los goles de la selección peruana junto a un pollito a la brasa, pasión, sabor y peruanidad al 100%.

2. Es crocante y jugoso
El pollo a la brasa nos vuelve locos por donde lo miremos. Desde que llega a la mesa su aroma hace que perdamos la razón. Con su piel doradita, el pecho suavecito, las piernas jugosas, sus alitas crocantes…es imposible no saborearlo y devorarlo hasta el último huesito.
3. Plato bandera y símbolo de la peruanidad
Hablamos del platillo más querido y consumido por los peruanos. Según la Según la Asociación Peruana de Avicultura (APA), el Perú es el mayor consumidor de pollo per cápita en la región por segundo año consecutivo. Además, señalan que los domingos se consumen 750.000 pollos en el país.
4. Las combinaciones son interminables
No importa si es prefieres la parte pierna o pecho de un pollo a la brasa siempre te sabrá a felicidad. Y siempre será contundente porque se disfruta super bien con papas fritas, con unas yuquitas crocantes, con las rejillas de camote, los tequeños brasa, o mejor aún… ¡con unos anticuchos!

Comments